La tuberculosis es una enfermedad infecciosa causada por un tipo de bacteria y que suele afectar a los pulmones. Se propaga por el aire cuando una persona infectada tose, estornuda o escupe.
Se estima que alrededor de una cuarta parte de la población mundial se ha infectado con el bacilo de la tuberculosis.
Entre el 5 y el 10% de las personas infectadas acabarán presentando síntomas y enfermando de tuberculosis.
Las personas que están infectadas pero que (aún) no han enfermado no pueden transmitir la enfermedad. La tuberculosis suele tratarse con antibióticos y puede ser mortal si no se trata.